IEEE Power & Energy Magazine - Spanish - September/October 2023 - 104

Jeffrey D. Taft
comunicación de las
empresas de servicios
públicos
liberar el valor de las redes digitales
E
104
EL USO DE LA COMUNICACIÓN
Electrónica junto con los sistemas eléctricos
se remonta a casi los comienzos
de la electricidad en los Estados Unidos,
lo cual no es de extrañar dada la
naturaleza geográficamente dispersa
de la infraestructura de energía eléctrica.
A medida que la tecnología del
sistema eléctrico avanzó, la comunicación
cambió de analógica a digital,
y los usos se ampliaron para incluir
transporte de telemetría del estado de
la red, protección y control, transporte
de datos de medición, participación en
el mercado eléctrico, coordinación entre
organizaciones y comunicación con
el cliente.
La llegada de la comunicación basada
en el Protocolo de Internet (IP)
y la amplia adopción de las tecnologías
digitales e informáticas en todos
los niveles de la jerarquía del sistema
eléctrico coincidieron con la naturaleza
cada vez más ubicua de la conectividad
de la comunicación. Para el 2010,
existían varios modelos para el uso de
la comunicación digital en las empresas
de servicios eléctricos, incluido el
modelo introducido por Cisco Systems.
Ese modelo tiene 11 niveles de comunicación
(no redes físicas) que abarcan
el sistema eléctrico de la distribución
local a la operación regional. Debido a
la estructura del sector eléctrico, ninguna
empresa de servicios eléctricos
contiene los 11 niveles, sino que, cada
vez más, la evolución de la red eléctrica
requiere conectividad e interoperabiliIdentificador
de objeto digital 10.1109/MPE.2023.3288597
Fecha de la versión actual: 21 de agosto de 2023
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dad entre esos niveles. Las empresas de
servicios eléctricos individuales a menudo
tenían (y algunas todavía tienen)
varios sistemas de comunicación física
para cualquier nivel determinado, por
lo tanto, no es inusual que una empresa
de servicios de distribución tenga
entre 8 y 10 o incluso más sistemas de
comunicación. La tecnología de comunicación
IP ofreció la oportunidad de
converger diversas redes, por lo que las
empresas de servicios públicos podían
pasar de redes propietarias para fines
especiales a redes multiservicio y multipropósito
más estandarizadas, y eso
hicieron. Al mismo tiempo, la mayoría
de las empresas de servicios públicos
aprovecharon las redes IP operadas por
los proveedores de servicios de telecomunicación
para algunas de sus necesidades
de comunicación, mientras que
reservaron otras funciones cruciales,
como la teleprotección, para las redes de
empresas de servicios públicos privadas.
Los proveedores de comunicación
inalámbrica iniciaron una transición a
través de varias generaciones de tecnologías
cada vez más capaces desde
la época del Sistema Global de Comunicación
Móvil (GSM), a tal punto que
la 5G está ampliamente disponible, y
se está planificando la 6G. La ley del
ancho de banda de Edholm, formulada
en el 2004, predijo una duplicación
del ancho de banda de la comunicación
aproximadamente cada 18 meses, con
las velocidades inalámbricas al principio
rezagadas con respecto a las velocidades
por cable, pero aumentando un
poco más rápido. Aplicar esa regla a las
tasas de transferencia de datos disponibles
en ese entonces sugiere que ahora
tendríamos tasas de datos móviles de
400-600 Mb/s y, de hecho, es lo que
sucede actualmente (aunque los portadores
dicen que las tasas teóricas son un
poco mayores: 10-20 Gb/s). La llegada
de 5G se ha considerado en algunos
sectores como la solución para todos los
problemas de comunicación de las empresas
de servicios eléctricos, incluida
la conectividad con fuentes de energía
de propiedad de empresas que no son
de servicios públicos y todo tipo de dispositivos
Internet de las Cosas (IoT, por
sus sigls en inglés).
Aun así, los problemas
abundan
Los horizontes temporales de la tecnología,
especialmente las tecnologías
de consumo (que incluyen la telefonía
móvil), son impulsados por la constante
competencia por ofrecer productos
mejores, más rápidos y más económicos
solo para sobrevivir, por no hablar
de prosperar y alcanzar el liderazgo en
el mercado. No se trata tanto de que los
productos tecnológicos dejan de funcionar,
sino de que sus propuestas de
valor son sobrepasadas por los costos/
beneficios de la próxima generación;
el ritmo de desarrollo eventualmente
lleva al abandono general de la tecnología
heredada a medida que cambian
el enfoque y la adopción, lo que hace
que no queden fabricantes ni repuestos
y poco o ningún valor en la generación
(continuación en la pág. 100)
septiembre/octubre 2023
en mi opinión
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